La castaña Negral es una variedad tradicional de las zonas de Valdeorras (Ourense) y el Bierzo (León), cultivándose junto con otras muchas en “soutos” centenarios de estas comarcas. Algunos estudios no han encontrado diferencias genéticas entre esta variedad y la denominada Courelá, cultivada en la zona de O Courel, por lo que podrían ser sinonimias, al igual que la variedad Riá, que podría ser el nombre que recibe la Negral en la Ribeira Sacra.

“Souto” tradicional en Rubiá (Valdeorras).

Curiosamente, a pesar de su nombre, no se trata de una castaña negruzca, si no que tiende más bien a un color rojizo oscuro, presentando listas bien marcadas. Su denominación puede deberse a que tradicionalmente en Valdeorras se solía cultivar junto a la variedad Raigona, incluso injertándose ambas en el mismo árbol, siendo esta última una de las variedades gallegas de color más claro que existe, por lo que la referencia a un color más oscuro (negral) podría deberse a este contraste. Los colores de las castañas se pueden clasificar mediante una escala del 1 al 7 según Santiago Pereira, en su tesis de 1994. Cada uno de los niveles de esta escala tiene el color de una variedad/clon/zona como referencia.

Variedades de referencia en la escala de color de las castañas.

Una de las características más importantes de la Negral son sus amentos longiestaminados que producen polen en gran abundancia, algo poco común entre las variedades tradicionales, lo que la hace una candidata perfecta para mejorar la polinización en las plantaciones y aumentar así la producción. Otras variedades longistaminadas recomendadas para tal fin son la Serodia y la Picona.

Amentos Longistaminados (Fuente: Variedades para os soutos novos; Centro de investigaciones Forestales de Lourizán)

No obstante, la Negral tiene ciertas ventajas sobre otras variedades polinizadoras, pues produce una castaña de muy buena calidad, de buen pelado, sabor y conservación, con un calibre medio de alrededor de 70 castañas/kg, siendo además una de las variedades de entrada en producción más temprana y muy productiva, utilizándose comúnmente para el mercado en fresco. Otra ventaja es que muestra una elevada tolerancia a la avispilla del castaño (Dryocosmus kuriphilus).

Castañas de la variedad negral.

En relación a su cultivo, como ya hemos comentado se utiliza para la producción de fruto y para la polinización cruzada con otras variedades (plantando entre un 10-20% de una variedad polinizadora la polinización estará asegurada), realizándose por lo general formaciones en copa a unos 2-2,5 metros y marcos de plantación de entre 8×8 y 12×12 metros, como suele ser habitual en plantaciones de este tipo, en Hifas Foresta al igual que el resto de las variedades sativa, injertamos la NEGRAL  sobre portainjertos híbridos resistentes a la tinta.

Amentos longistaminados de un castaño negral injertado sobre clon híbrido 7521 creciendo en el vivero de Hifas Foresta